El Gaula De La Policía, en articulación con la FISCALÍA, desplegó la operación Nacional “MAGNUS” contra los grupos multicrimen, ofensiva que dejó 121 personas capturadas, la incautación de 7 armas de fuego, 55 cartuchos de diferentes calibres, 5 proveedores, 3 granadas, 5 motocicletas y 65 celulares empleados para cometer sus crímenes.

Los operativos se adelantaron en BOGOTÁ, MEDELLÍN, BARRANQUILLA, CARTAGENA y los departamentos de BOYACÁ, CAQUETÁ, PUTUMAYO, CALDAS, QUINDÍO, ARAUCA, NORTE DE SANTANDER, SANTANDER, ANTIOQUIA, META, CESAR, GUAJIRA; al igual que en las subregiones de MAGDALENA MEDIO y URABÁ.

En la ciudad de BARRANQUILLA, fueron capturados 9 presuntos integrantes del grupo delincuencial “RASTROJOS COSTEÑOS”, responsables de llevar a cabo EXTORSIONES y HOMICIDIOS a comerciantes de los barrios CIUDADELA, SIETE DE ABRIL y CARRIZAL.

Un minucioso proceso investigativo adelantado por el GAULA durante 6 meses, permitió a los uniformados determinar que alias “EL NEGRO OBER”, en busca de evadir el accionar de las autoridades, enviaba emisarios hasta los diferentes sectores comerciales de la ciudad para entregar panfletos amenazantes y celulares, a través de los cuales se identificaba como “COMANDANTE SOMBRA”, exigiéndole dinero a sus víctimas para no atentar contra sus vidas, la de sus familiares, empleados o establecimientos de comercio.

Entre los capturados se encuentra alias “LA ABUELA”, madre de otro de los integrantes de esta organización conocido como “Chapu”, quien actualmente se encuentra recluido en un centro penitenciario.

Esta mujer, tenía la responsabilidad de recaudar el dinero producto de las extorsiones y la venta de estupefacientes en la ciudad de Barranquilla.

“ELIANY”, quien se encontraba ocultándose en el municipio de REPELÓN, era mujer de confianza del “Negro Ober”, y sería la responsable de coordinar extorsiones, compra de armamento, atentados contra comerciantes; además, realizaba la perfilación de potenciales víctimas para enviárselas a este cabecilla y lo asesoraba en la creación de cuentas virtuales donde los afectados depositaban el dinero de las exigencias.